5 RECOMENDACIONES PARA CONTROLAR LA IMPULSIVIDAD

¿Estás acostumbrado/a a actuar de forma impulsiva? ¿No sabes qué hacer para poder potenciar tu autocontrol?

Frecuentemente, actuar de forma impulsiva tiene un impacto negativo en muchas áreas de la vida: laboral, personal, social, etc.

Cuando las emociones nos invaden, puede resultar complicado no dejarse llevar por ellas y tomar decisiones repentinas e impulsivas.

Por ello, a continuación, vamos a aprender una serie de recomendaciones que os ayudarán a controlar la impulsividad.

¿QUÉ ES LA IMPULSIVIDAD?

El término impulsividad hace referencia a la predisposición a actuar rápidamente, sin planearlo previamente y sin considerar las posibles consecuencias o efectos derivados de nuestros actos.

Las reacciones impulsivas no tienen por qué ocurrir constantemente. De hecho, a menudo, suelen ocurrir en ciertas situaciones o contextos con alta carga emocional, que se perciben, incluso, como amenazantes.

¿CUÁL ES LA CLAVE PARA TRABAJAR LA IMPULSIVIDAD?

Lo más efectivo para trabajar la conducta impulsiva es aprender a gestionar nuestras emociones.

Como hemos visto en otras ocasiones, todas las emociones son adaptativas y tienen una función cuando aparecen. Es decir, son necesarias para nuestra supervivencia. Sin embargo, la respuesta emocional puede no estar regulada correctamente, dando lugar a situaciones como, por ejemplo, alerta ante situaciones donde no existe un peligro real (ansiedad).

Por ello, conocer y comprender nuestras emociones es fundamental para poder regularlas y ajustarnos a la situación de la forma más adaptativa posible.

¿SE PUEDE LLEGAR REALMENTE A CONTROLAR LA IMPULSIVIDAD?

¡Por supuesto que sí!

El objetivo del tratamiento dirigido al control de impulsos se centra en trabajar la relación entre estado interno y emocional de la persona y la conducta impulsiva, que se relaciona con el contexto. 

Es decir, se busca conseguir que, ante una situación con alta carga emocional, la persona pueda no realizar aquellas conductas desfavorables con consecuencias negativas. Por ello, no se trata de controlar o reducir la intensidad emocional de la situación (rabia, tristeza, ira, frustración, etc.), sino de conseguir que la persona aprenda a regular dichas emociones y actúe de otra forma.

En definitiva, mediante el trabajo en terapia, se aprenden otras formas diferentes de reaccionar y se favorece que la persona disponga de un abanico más amplio de comportamientos más adaptativos o funcionales que las conductas impulsivas previas.

5 RECOMENDACIONES PARA CONTROLAR LA IMPULSIVIDAD

Para comenzar a controlar la conducta impulsiva, os dejo a continuación una serie de recomendaciones que te ayudarán a tomar conciencia y empezar tu cambio.

1. ¡Conócete!

Trata de identificar los estímulos, tanto internos como externos, que activan tus conductas impulsivas. Te recomiendo que comiences un registro para poder observar mejor tus patrones. Ser conscientes de los eventos y de las emociones, te ayudará a poner el foco en ellas.

2. Detecta las situaciones.

Una vez tengas tu registro, es momento de usarlo. Trata de identificar las situaciones que te detonan justo cuando ocurren.

3. Genera auto-instrucciones.

Busca una instrucción para decirte a ti mismo/a en esos momentos. Esto te ayudará a saber cómo responder o reaccionar, sin dejarte llevar por tus impulsos.

4. Realiza ejercicios de relajación.

Cuando existe un nivel de activación muy elevado, es interesante adquirir el hábito de realizar ejercicios de relajación que puedan regular tus emociones cada día. ¡Son muy beneficiosas!

5. Piensa alternativas.

Ahora que eres consciente de tu forma de actuar, puedes elaborar diferentes pautas de actuación para las situaciones críticas. Si realizas estas conductas en varias ocasiones, llegarán a convertirse en un hábito para ti, reduciendo tus conductas impulsivas pasadas.

Si tus conductas impulsivas no cesan, PsicoLaume, psicóloga sanitaria online y en Madrid, puede ayudarte a gestionar tus emociones y reducir estos comportamientos para que no estén continuamente presentes en tu día a día.

Además, si buscas un/a psicólogo/a online, PsicoLaume está completamente adaptado a las nuevas tecnologías. Con nuestro servicio de terapia online podrás realizar tus sesiones a través de videollamada: un modo más económico, cómodo y flexible para ti.

Y, si quieres, ¡puedes dejarnos tus dudas o contarnos tu experiencia en el apartado de comentarios!

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