Hablamos de dependencia emocional cuando un individuo establece una fuerte vinculación con otra persona y se caracteriza por necesitar al/a la otro/a constantemente, un sentimiento de temor a que la relación se termine y una presencia de sufrimiento o malestar significativo que está presente frecuentemente.
La dependencia emocional es un problema muy habitual hoy en día y cada vez es más frecuente que una persona decida acudir a terapia psicológica con la preocupación de padecer dicha problemática.
Superar la dependencia emocional no es sencillo, pero con el tratamiento adecuado se puede lograr con éxito. ¿Cómo se puede conseguir?
El primer paso lo conseguirás a través de este post: conocer realmente en qué consiste esta dependencia afectiva, cómo surge y cómo identificarla.
¿QUÉ ES LA DEPENDENCIA EMOCIONAL?
La dependencia emocional es un patrón psicológico que consiste en un estilo de vinculación afectiva o sentimental que conlleva una serie de comportamientos adictivos, que se dan en una relación interpersonal donde suele existir una asimetría en el rol que asume cada persona.
Aunque se puede dar en cualquier tipo de relación con los/as demás, es más frecuente en las relaciones de pareja. Este desequilibrio emocional puede conllevar una relación insana y destructiva.
En este sentido, la dependencia emocional conlleva emociones, pensamientos y conductas orientados a la búsqueda de proximidad de la otra persona, para conseguir sentimientos de satisfacción, reconocimiento y seguridad.
Asimismo, puede estar acompañada de creencias distorsionadas sobre el amor, las relaciones, la soledad e, incluso, sobre uno/a mismo/a.
¿QUÉ CAUSA LA DEPENDENCIA EMOCIONAL?
Existen muchos factores que se relacionan con esta dependencia afectiva o relacional.
Por un lado, a nivel social existe una construcción de la pareja basada en los mitos del amor romántico, que fomentan las sensaciones de sentirse incompleto/a. Estas variables aparecen representadas en el cine, la televisión y la literatura donde se muestra este mensaje sobre el amor y la necesidad del mismo en las personas.
Por ello, aparecen ideas erróneas sobre la confianza y el control, y se da una mayor relevancia al papel que tiene la pareja en la vida del individuo, siendo, en ocasiones, indispensable en su vida y sin la cual su existencia pierde sentido.
Esta vinculación afectiva se correlaciona con trastornos del apego. El apego es el lazo emocional que establecemos con las personas significativas de nuestra vida, aquellas con las que compartimos sentimientos de pertenencia y seguridad; son parte de nuestro “tejido emocional” y se crea desde edades muy tempranas.
Generalmente, las personas que acaban desarrollando dependencia emocional establecen vínculos caracterizados por un apego ansioso o inseguro. Es decir, lo predominante en sus vínculos es un miedo persistente a que la relación se termine. Este patrón es recurrente y se repite en las diferentes relaciones que la persona establece a lo largo de su vida.
Por consiguiente, las personas que manifiestan comportamientos relacionados con dicha dependencia emocional, suelen tener una baja autoestima y un alto grado de inseguridad.
¿CÓMO IDENTIFICAR SI TENGO DEPENDENCIA EMOCIONAL?
Hay algunas características en las que podemos fijarnos para evaluar si somos propensos/as a establecer relaciones de dependencia, por ejemplo:
- Miedo al abandono, al rechazo y a la soledad.
- Pánico constante a perder a la otra persona reflejado en conductas asociadas como, por ejemplo, control y celos patológicos.
- Idealización de la pareja.
- Tendencia a anular los propios deseos en favor de la otra persona.
- Necesidad de involucrar a la otra persona en todas las actividades o pedir su opinión ante cualquier decisión.
- La felicidad se centra en nuestra pareja.
- Comunicación ambigua y dificultad para resolver conflictos.
- Complejidad a la hora de defender una opinión opuesta a la de la otra persona.
- Sensación de malestar y sentimientos de culpabilidad cuando se está en desacuerdo.
- Tendencia al aislamiento social.
- Se fomenta el sacrificio como manera de “querer” al/a la otro/a.
- Sensación de que las relaciones se convierten en una “montaña rusa de emociones”.
TRATAMIENTO DE LA DEPENDENCIA EMOCIONAL
Las personas que experimentan dicha dependencia emocional a menudo manifiestan trastornos de ansiedad o del estado de ánimo; y éste suele ser frecuentemente el motivo inicial de consulta de estos/as pacientes.
Sin embargo, el trabajo terapéutico que se realiza no ha de centrarse sólo en los síntomas, sino en el origen de estos.
Por ello, en PsicoLaume, a través de nuestra terapia online, orientamos el tratamiento psicológico a establecer un vínculo corrector que fomente la autonomía y acelere el proceso de individuación.
Como hemos mencionado, el tipo de apego con el que nos vinculamos es fundamental en nuestras relaciones sociales. Por tanto, es necesario acudir a un/a especialista de la salud mental para lograr el éxito terapéutico.
En conclusión, trabajando en terapia, lograrás decir adiós a este vínculo emocional dependiente reparando tu apego y abandonarás esas creencias irracionales sobre el amor, las relaciones y los roles en pareja. Asimismo, desarrollarás tu independencia, autonomía y tu autoestima se verá reforzada y modulada con recursos internos.
¡Esto te permitirá tener relaciones sanas donde te sientas bien!
En nuestro primer contacto gratuito sin compromiso, podrás informarte de todas las posibilidades de nuestra terapia online y orientarte sobre lo más adecuado para ti.